lunes, 26 de octubre de 2009

Pensando en Copenhage

Que la temperatura media de la Tierra subirá en los próximos años a consecuencia del cambio climático, es un hecho que ya nadie con criterio científico pone en duda. Ahora, lo que toca de cara a la próxima cumbre de Copenhage (donde se negociará un nuevo protocolo a implementar a partir del 2012 en sustitución del de Kyoto), lo importante es intentar limitar al máximo esa subida de temperatura que, lógicamente, tendrá efectos diferentes a los largo y ancho del planeta. ¿Aumentará como estiman los escenarios más optimistas 2ºC por encima de la media que había antes de la era industrial? ¿O se incrementará 4ºC o más, como realmente apuntan las previsiones más aciagas?
Aunque pueda parecer una nimiedad, dos grados desgraciadamente no son una chorrada y por lo que parece, doblarlos puede ser catastrófico para ciertas áreas geográficas. Las estimaciones preven que cuatro grados de aumento medio pueden redundar en hasta 10º en el Ártico o en ciertas partes de África, donde los ecosistemas ya de por sí extremos sufrirán un estrés ambiental de consecuencias difíciles cuantificar con exactitud.

Por eso, y para agitar el señuelo de Copenhague, hace pocos días el gobierno británico presentó un interesante mapa que muestra los efectos que el calentamiento global causará en los diferentes continentes, una topografía del cambio climático que ha sido realizada por la Met Office (Servivio de Meteorología de Gran Bretaña) y el Museo de Ciencias de Londres.

Falta muy poco para la cumbre de Copenhague. Entre el 7 y el 18 de diciembre, en la capital danesa se pondrá en evidencia qué mundo realmente queremos legar. Nuestros líderes decidirán por todos nosotros, pues al fin y al cabo, nosotros los elegimos, tanto los que votamos como los que no. Vamos a ver de qué pasta estamos hechos y, mientras tanto, apaguemos la luz que no necesitemos y reciclemos, que no cuesta tanto esfuerzo y, sobre todo, nos da algún derecho a protestar.

lunes, 19 de octubre de 2009

La familia al completo


Fue en el Pallars Sobirà donde Antoni Batet y Gerard Canut lograron esta imagen sorprendente, donde se pueden contemplar en el mismo encuadre las cuatro especies de buitre que existen en Europa.
El quebrantahuesos, en el centro, el alimoche y los buitres negro y leonado se dieron cita en uno de los comederos dispuestos para lograr la recuperación de las carroñeras. La estampa sale en la edición española de National Geographic de este mes.

viernes, 9 de octubre de 2009

Cocinas solares: Sol Solidari

Me hace gracia descubrir que el naturalista suizo Horace-Bénédict de Saussure, cuya espléndida colección de instrumentos científicos pude ver recientemente en el Museo de la Historia de las Ciencias de Ginebra, fue el inventor de una de las primeras cocinas solares del mundo en 1767. Tras construir una caja negra con tapa de cristal y exponerla al sol, observó cómo la temperatura interior rozaba los 85ºC, cifra que logró superar ampliamente tras varias modificaciones. De Saussure no pretendía cocinar nada, él andaba experimentando con la radiación solar a distintas alturas. Sin embargo su artilugio inspiró a otros científicos, como al astrónomo Herschel, que en una expedición a Sudáfrica se cocinó un huevo en su caja solar. O al científico francés Auguste Mouchot, inventor del primer motor solar tras experimentar con una cocina solar que presentó a Napoleón en la Exposición Mundial de París de 1878.

Hoy las cocinas solares son objeto de programas de cooperación en todo el mundo porque son muchas las ventajas que representan para los habitantes de territorios con muchas horas de insolación donde es difícil hacer acopio de combustible. Teniendo en cuenta estos dos criterios y la dimensión poblacional, se considera que en África y Asia se encuentra la mayor parte de los países más idóneos para acoger estos colectores de energía que, además de cocinar los alimentos, pueden pasteurizar el agua evitando muchas infecciones. Por ello, el principal objetivo de la Asociación de Cooperación Sol Solidari es proporcionar cocinas solares a las comunidades de países en desarrollo. Unas valiosas herramientas de uso cotidiano que además conllevan importantes beneficios sanitarios, sociales, económicos y ambientales. Por el momento, Sol Solidari desarrolla proyectos en Mali y Etiopía al tiempo que planea nuevos proyectos en otros países africanos.

viernes, 2 de octubre de 2009

Copyright: Montse Roldós

Conozco
a Montse Roldós desde
hace muchos años.
Me
encanta
lo que hace y hoy, chafar- deando en su web, www.montseroldos.com, he creído oportuno colgar aquí, con su permiso, algunas de sus ilustraciones. Pretendo que os entre el gusanillo de ver qué hace esta artista vocacional, cuyos cuadros cuelgan ya en las paredes de muchos de mis amigos, creando un bonito vínculo colorista que nos hace sentir que compartimos un mundo común en el que nos encontramos muy a gusto. Endavant, Montse!